fbpx

No cabe duda de que la invención de las toallitas de bebé supuso una revolución a la hora de agilizar el cambio del pañal. Aunque se sigan utilizando con éxito opciones tradicionales y naturales como la higiene mediante agua y jabón, en caso de salidas fuera de casa en las que no es factible disponer de lo necesario, las toallitas se han convertido en un objeto imprescindible. Es más, existen familias que no conciben otra forma de limpieza para los niños. Ideadas para mantener limpia la zona íntima, en poco tiempo las familias comenzaron a idear otros usos para las toallitas de bebé. La extensión más lógica fue la de usarlas también para limpiarles las manos y la cara, ya que son las zonas de los niños pequeños más expuestas a la suciedad cuando están en la calle ¡o en casa! Lo ideal es optar por toallitas sin químicos tóxicos, para que respeten las pieles más delicadas, y con el mayor porcentaje de ingredientes biodegradables, para que su uso no vaya en contra de la sostenibilidad del planeta. Justo así son las toallitas Pingo, y hoy os contamos otras utilidades insospechadas para las que también pueden seros de ayuda.

Higiene para adultos

Asociamos las toallitas para bebés con los más pequeños de la casa, puesto que fueron diseñadas específicamente para ellos. Sin embargo, hay niños y adultos que al crecer no soportan el roce del papel higiénico convencional: tener la piel con tendencia atópica, especialmente sensible, o padecer alteraciones como el Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple, les hace muy difícil mantener la higiene de la zona genital y anal. Estas personas se ven empujadas a seguir utilizando toallitas para bebés de por vida, un motivo por el que es especialmente recomendable vigilar la composición de las que elijan utilizar, puesto que su exposición a las sustancias químicas que las compongan no se va a limitar a un periodo relativamente corto de unos 3 años (cuando se suele abandonar el pañal), sino que les va a acompañar de por vida. En estos casos, hay que tener muy presente que las toallitas para bebés no se pueden desechar a través del váter, sino que deben depositarse siempre en la basura a fin de evitar atascos y favorecer que sean correctamente tratadas para su eliminación.

Desmaquillante para mamás ¡y niños!

Si vuestros hijos disfrutan disfrazándose hasta las últimas consecuencias, seguro que cuando son muy pequeños os habéis encontrado con esta situación: ceras o pinturas faciales que no salen simplemente con agua, pero para las que no os atrevéis a usar un desmaquillante de adultos porque os parece que puede ser demasiado agresivo para la piel de los pequeños. Este es uno de los usos para las toallitas de bebés más impresionantes, porque simplemente con su formulación, que incluye un poco de jabón suave, podéis conseguir retirar los restos de pintura de una forma delicada. Es más, para mamás que se maquillan sólo ligeramente, las toallitas también pueden serviros para eliminar las pinturas que no sean especialmente resistentes. ¿Queréis hacer la prueba?

Usos para las toallitas de bebé que te alucinarán

Hasta que no te veas en una situación desesperada, en la que lo único que tengas a mano sea una toallita de bebé, no te darás cuenta de la cantidad de soluciones que te pueden aportar de una forma tan práctica. Las manchas que los niños dejan en las paredes al tocarlo todo con las manos sucias de comida, de pintura… Mediante una pasada, haciendo un poco de fuerza con una toallita, las eliminarás sin dejar cercos ni marcas alrededor. Los teclados de ordenador, las pantallas de las tablets y los móviles, por mucho que intentemos mantenerlos alejados de estas tecnologías el máximo tiempo posible, lo cierto es que estas nuevas generaciones de nativos digitales van a atacar con sus deditos pringosos todo tipo de artilugios, así es que para todo aquello en lo que no puedas usar directamente agua y jabón ¡prueba con la magia de una toallita!

Zapatos brillantes en cualquier momento

Que los zapatos de los niños no parecen nuevos desde la primera puesta es una realidad contra la que no se puede luchar. Sin embargo, sí podemos lograr que se vean limpios, sin restos de polvo, tierra, barro, hierba, etc. simplemente usando unas toallitas. Pero no sólo el calzado infantil puede beneficiarse de este privilegio. ¿Cuántas veces has salido de casa y no ha sido hasta mucho después cuando te has percatado del estado de tus zapatos? Incluso sobre materiales como la piel o el ante, los resultados son muy buenos. También es un truco válido para limpiar bolsos, porque ya sabemos lo sufridos que suelen ser al compartir espacio junto a los niños.

¿Se te han secado las toallitas?

No es lo habitual, porque las toallitas Pingo suelen estar impregnadas con una cantidad generosa de loción, pero si ocurre, y las que se han secado son sólo las primeras toallitas, puedes probar a darle la vuelta al paquete durante unas horas, de forma que la loción de las capas inferiores pase a las superiores. Si ya no tiene solución porque se ha deshidratado todo el paquete, podéis aprovechar las toallitas que se hayan quedado completamente secas para perfumarlas con vuestros aromas preferidos y utilizarlas como ambientadores en los armarios y cajones. La celulosa de las toallitas es muy absorbente y la loción de Pingo tiene un aroma muy neutro, por lo que desaparecerá para no interferir con vuestras fragancias. 

Y todo esto, sin contar con el paquete de las toallitas como uno de los juguetes preferidos por los bebés. Ese crujido al apretar la bolsa, la tapa que se abre y se cierra según su voluntad… ¿En qué otras situaciones te han salvado la vida las toallitas?